Aunque la recomendación de los médicos para alguien alérgico a los perros es evitar cualquier contacto con los alérgenos que pueden presentarse en el hogar, aún así, hay diversos métodos para no dejar que te afecte y puedas seguir teniendo, o tener por primera vez, un mejor amigo peludo.
La recomendación de los médicos sobre la alergia a los perros es evitar cualquier contacto con los alérgenos que pueden presentarse en el hogar (caspa, pelo, saliva, orina, heces…), pues estos son los causantes de provocar los síntomas en tu sistema inmunitario. Aún así, hay diversos métodos para no dejar que te afecte la alergia y puedas seguir teniendo, o tener por primera vez, un mejor amigo peludo.
Consejos para vivir con un perro siendo alérgico
- Comprueba tu reacción hacia el perro escogido. Si bien se dice que existen razas de perros hipoalergénicas, esto varía de acuerdo con la persona. Cada individuo presenta diferentes síntomas ante cierto tipo de perros. Lo mejor es comprobar personalmente cuál es tu reacción específicamente hacia el amigo peludo que quieres tener en casa o que ya tienes.
- Contacta con un especialista para un tratamiento de control de síntomas. Hay diversas medidas que se pueden adoptar para mantener a raya los síntomas y no dejar que impidan tu convivencia con tu mejor amigo de 4 patas; entre ellas se encuentran los antihistamínicos y la inmunoterapia con vacunas específicas.
- Evitar el uso de alfombras, cojines, muebles tapizados, etc. Estos conllevan la posibilidad de retener los agentes alérgenos con mayor facilidad y cantidad, lo que podría resultar contraproducente para lo que buscas.
- Aplicar lociones específicas que eliminan el alérgeno de la piel y pelo del canino. Esto tendrá que hacerlo una persona que no sea alérgica.
- No dormir con él. Sin importar cuánto amor le tengamos a nuestro mejor amigo peludo, no debemos dejarlo entrar a nuestra habitación y mucho menos dejar que duerma en la misma cama en que lo hacemos si nos causa alergia.
Otras recomendaciones si eres alérgico a los perros
- Lavar semanalmente la cama del canino.
- Conseguir purificadores de aire, filtros para aire acondicionado y deshumidificadores. Estos ayudarán a limpiar el aire que circula en tu hogar y a limitar la mayor cantidad posible los alérgenos presentes en él.
- Aspirar el suelo con regularidad utilizando filtros de alta eficiencia. Por el contrario, debes evitar el uso de plumeros o escobas, que solo contribuirán a esparcir los alérgenos que se encuentren en el suelo de tu hogar. Ello complicará en mayor medida tu objetivo.
- Lavarte bien las manos después de haber tenido contacto con tu amigo de 4 patas. Esto eliminará cualquier alérgeno que pueda llegar a alojarse en tus manos. Recuerda utilizar mucho jabón y gel antibacteriano después.
- Conseguir un aliado no alérgico. Él o ella te podrán ayudar en ciertas tareas que pueden ser difíciles, como bañarlo, cepillarlo, limpiar su cama o recoger y limpiar sus desechos.
Ahora ves que no es imposible vivir con un perro siendo alérgico. Con un poco de dedicación a la limpieza y tomando ciertos cuidados especiales, puedes darte el lujo de vivir con un fantástico compañero. No olvides poner en práctica estos consejos y a disfrutar de su compañía.
Todos los consejos que te brindamos aquí son sugerencias. Siempre debes acudir con tu médico especialista para que evalúe personalmente tu caso y obtengas el mejor tratamiento posible. Para mayor información referida a nuestras mascotas vivista nuestras diferentes secciones de la web