Entre todas las razas de perros, el Carlino o Pug es el que tiene y sufre el mayor riesgo de obesidad.
Cuidar de nuestra mascota que no tenga riesgo de obesidad, es el tema de todos los días, para una alimentacion sana como para una actividad física adecuada para ellos. Pero existe una raza que una reciente investigación del Royal Veterinary College ha destacado que el perro de raza Carlino o Pug, que tiene una probabilidad tres veces mayor de ser obeso en comparación con otros perros.
Esto es lo que se desprende de una reciente investigación del Royal Veterinary College (RVC), en colaboración con el Brachycephalic Working Group (BWC), que trabaja para mejorar la salud y el bienestar de los perros braquicéfalos.
La investigación revela que casi uno de cada cinco Carlino (17%) es declarado formalmente obeso cada año, y que los Carlino tienen tres veces más probabilidades de ser obesos en comparación con otros perros. La obesidad conlleva graves riesgos para el bienestar de los perros, incluyendo una vida más corta, una menor calidad de vida y una mayor frecuencia de enfermedades como la artritis, problemas respiratorios, enfermedades cardíacas, diabetes mellitus y algunos tipos de cáncer.
Prevención de la obesidad en el perro Carlino
El BWC, que incluye a veterinarios, organizaciones de atención, universidades, el gobierno, criadores y propietarios, insta a prevenir la obesidad en los perros braquicéfalos y, en particular, en los perros de raza Pug o Carlino, considerados los más propensos al sobrepeso, con el fin de proteger su bienestar.
De hecho, al gestionar la dieta y, sobre todo, proporcionar a los perros una buena cantidad de ejercicio físico, se pueden evitar o al menos limitar los problemas relacionados con el peso. Para enfatizar este concepto, el The Kennel Club, junto con los clubes de raza Pug, que están compuestos por entusiastas de la raza, propietarios y criadores, ha revisado el “estándar de la raza Pug”.
En la descripción se declara que la raza de perro Carlino o Pug, no deben ser obesos.
El doctor Dan O’Neill, quien lideró la investigación del RVC sobre la obesidad en los Carlino y es el presidente del BWC, comentó: “Muchos individuos de diferentes razas de perros, incluyendo los Carlino, tienen una predisposición genética a comer en exceso”.
Pero si duda, el desarrollo de la obesidad en los Carlino es evitable y depende de no permitirles tener comida siempre disponible. Sin embargo, no solo los propietarios de Carlino deben tener estas precauciones con respecto a su perro.
El llamado va dirigido también a aquellos que tienen a su cargo perros de otras razas. El BWG se ha comprometido con un plan estratégico quinquenal para acelerar la mejora de la salud y el bienestar de las generaciones actuales y futuras de perros braquicéfalos.
