Los ojos del perro, el sentido de la vista o mejor, la visión en el perro no es tan esencial y precisa en ellos como lo es en nuestra especie humana.
Porque el perro con su olfato también puede compensar una pérdida total de visión, seguir infinitos caminos olfativos y vivir, en cualquier caso, una existencia tranquila.
¿Cómo ve el perro?
Para nosotros la clasificación de los sentidos tiene este orden: primero la vista, el oído y el olfato. Para nuestro querido amigo en cambio es: primero el olfato, después el oído y por ultimo la vista.
Pero, ¿Cómo es el ojo del perro?
La porción más grande y exterior, de color blanco, se llama esclerótica. La córnea es la capa muy delgada y transparente que recubre la parte frontal del ojo y permite que la luz lo atraviese. El iris es la porción que da el color característico de los ojos.
La pupila es el orificio situado en el centro del iris de diámetro variable, que permite la entrada de luz en el ojo. Sus dimensiones de apertura y cierre están reguladas, según la intensidad de la luz, por un sistema de músculos. La retina es la capa más interna a partir de la cual comienza el nervio óptico.
Una cámara fotográfica perfecta
El ojo también para ellos, funciona como una cámara fotográfica. Entonces la imagen formada en la retina se transforma en una corriente nerviosa que llega al cerebro donde está la sensación visual.
Foco “nasal”
Ver de cerca para un perro es prácticamente imposible porque, si un objeto tiene menos de 50 cm, aparece completamente borroso. Cuando un perro quiere recoger un objeto cercano, lo olerá antes de agarrarlo, y solo una vez que su nariz se haya “enfocado en el objeto” lo agarrará. Los perros ven un objeto inmóvil a una distancia máxima de 400 metros, pero si se mueve pueden distinguirlo incluso a 800 metros.
Espejo natural
Los perros ven bien de noche gracias a una membrana reflectora especial llamada tapetum lucidum, colocada justo detrás de la retina. Es un espejo natural que tiene la función de reflejar la luz hacia la retina, aumentando la cantidad que puede ser captada por la propia retina.
Esto amplifica la visión en condiciones de poca luz.
La vista del perro en primer plano
El perro tiene los ojos colocados generalmente de lado, con diferencias en las distintas razas, porque su caza es de persecución y por lo tanto debe controlar simultáneamente la presa y el espacio frente a ella. Situado inmediatamente detrás de la retina, el tapetum lucidum es un espejo natural que refleja la luz hacia la propia retina y permite al perro ver bien en la oscuridad.
Los perros son básicamente daltónicos, y además tienen pupilas circulares, parecidas a las nuestras, porque realizan su actividad principalmente durante el día y al atardecer. Pueden distinguir el amarillo, el verde y el morado, mientras que no pueden distinguir el rojo entre otros colores y no pueden distinguir el morado del azul.
EN RESUME
– Agudeza visual – Los perros no tienen tan buena agudeza visual como las personas: su vista alcanza cuatro veces menos distancia que la nuestra. Para diferenciar un objeto a lo lejos, los humanos necesitamos 100 metros, mientras que los perros, para verlo igual, necesitan estar a 25 metros.
– Distancia de enfoque – A los perros les cuesta más que a nosotros ver con nitidez los objetos cercanos. Un perro necesita alejarse 30 centímetros para diferenciar un objeto de cerca, frente a los 6 centímetros de distancia que necesitamos los seres humanos.
– Ángulo de visión – Mientras que las personas tenemos un ángulo de 180º, el campo de visión de nuestros amigos peludos alcanza los 250º.
– Detección de movimiento – Los perros son mejores que nosotros en detectar patrones de movimiento. Cuando un objeto se encuentra en movimiento su capacidad visual se multiplica por tres. Además, la frecuencia con la que capturan y procesan imágenes los perros es mayor que la nuestra. Al procesar más imágenes por segundo, es como si vieran la secuencia a cámara lenta.
– Percepción del color – Los humanos tenemos tres tipos de conos, gracias a los cuales podemos distinguir el verde del rojo y el azul del amarillo. En cambio, los perros solo poseen dos tipos de conos. Por esta razón, los perros sí pueden distinguir el azul del amarillo, pero perciben el verde y el rojo de una manera diferente a la nuestra.
– Visión nocturna – La visión de un perro en la oscuridad es también mejor que la de una persona. Y es que, aunque tienen un tipo menos de conos, tienen las pupilas más grandes y disponen de muchos más bastones, los receptores encargados de la sensibilidad visual en condiciones de poca iluminación.
Para explicar cómo ven los perros en pocas palabras, podemos decir que a tu perro le cuesta encontrar una pelota a lo lejos, no es capaz de distinguir todos los detalles de cerca y te reconoce mejor por tu forma de caminar que por su silueta. Y, además, ¡a oscuras ve mucho mejor que tú!