Seguro te ha pasado algunas veces que tu mascota está tranquilamente en el sofá o deleitándose con sus croquetas, y de repente, ¡boom!, se desata la locura y corren como loco pasando por la casa a velocidad o correr en círculo sin ninguna razón.
Imagina la escena: tu adorable mascota está descansando plácidamente en el sofá o disfrutando de sus croquetas, cuando de repente abre los ojos de par en par, se detiene por un momento y comienza a correr por la casa como un rayo.
¿Qué diablos está pasando en sus cabezas peludas? ¡No entres en pánico! En este artículo te contamos sobre el intrigante mundo de las “Frap”, descubriremos por qué nuestros fieles compañeros de cuatro patas se lanzan a correr como si no hubiera un mañana. Prepárate para reír, aprender y entender esos momentos de pura energía desbordante. ¡Bienvenidos a la diversión!
¡A correr se ha dicho! Descifrando el enigma de las explosiones de energía en nuestras mascotas.
Aunque pueda parecer sorprendente, este comportamiento es bastante común tanto en perros como en gatos. Y aunque en ocasiones pueda asustarte, no hay motivo para preocuparse.
Estas explosiones de energía tienen un nombre técnico: FRAP, que significa “Frenetic random activity periods” o periodos de actividad frenética aleatoria. Puede parecer que tu gato o perro está enloqueciendo por unos minutos, para luego regresar a la calma y relajación poco después. Estos episodios suelen durar solo unos segundos, raramente superan los dos minutos, pero pueden ser tan “explosivos” que parecen mucho más largos o intensos de lo que realmente son. Y si te preguntas si hay alguna razón detrás de este repentino estallido de energía en tu peludo amigo, tranquilo, simplemente se está divirtiendo y necesita liberar un poco de energía acumulada.
Perspectiva canina. Entendiendo el FRAP
Existen momentos específicos en los que tu perro es más propenso a experimentar un FRAP. Esto suele ocurrir justo después de salir de su transportín, cuando regresas a casa después del trabajo o después de hacer sus necesidades después de retenerlas por mucho tiempo. Cada perro tiene su propia forma de expresarlo, ya sea corriendo en círculos, persiguiendo su cola, yendo de una habitación a otra o de un árbol a otro como si hubiera una ardilla que perseguir.
Este momento es valioso para ellos, ya que les permite liberar la energía nerviosa acumulada y deshacerse de los residuos de excitación que podrían estresarlos. Los cachorros son más propensos que los perros adultos a experimentar FRAP, al igual que algunas razas más atléticas y nerviosas que lo hacen para relajarse antes de tomar una siesta.
Perspectiva felina: Los “triggers” de los gatos
Los gatos tienen diferentes “triggers” que suelen manifestarse al atardecer o al amanecer, momentos en los que son naturalmente más activos. Gracias a su sigiloso caminar y sin hacer ruido, ver a tu gato saltar repentinamente del sofá al alféizar, del alféizar a la estantería y luego correr hacia la puerta del baño, tal vez derribando algunas cosas o haciendo extraños ruidos durante la frenesí, podría asustar o desconcertar. Algunos piensan que su gato esconde “un lado psicopático” y difícil da gestionar.
Pero todo lo que hace está dentro de su naturaleza cazadora y está codificado en su ADN. Los gatos tienden a correr durante menos tiempo que los perros, pero no hay grandes diferencias entre las razas.
Cuándo preocuparse
Aunque muchos animales, desde hurones hasta elefantes, a veces experimentan FRAP, un estudio sobre conejos blancos demostró que es su manera de expresar felicidad y emoción.
Aunque sea un comportamiento normal, a ojos no entrenados podría parecer que el animal ha perdido la razón de repente o que algo anda mal. Algunos incluso interpretan los FRAP como un comportamiento obsesivo compulsivo. En la mayoría de los casos, no es nada de eso. Sin embargo, si observas que tu perro o gato muestra otros síntomas o estás seriamente preocupado por su salud, es mejor consultar a un veterinario.
No subestimes el hecho de que, al saltar o correr desenfrenadamente, los perros y gatos podrían chocar contra algo y lastimarse. Por lo tanto, sé consciente y tómalo como una señal para adaptar tu hogar a las necesidades de tu mascota. Asegúrate de que tu espacio sea seguro y amigable para tus peludos amigos, permitiéndoles disfrutar de sus momentos de FRAP sin preocupaciones.
Entonces ahora recuerda, cuando tus amigos peludos entren en modo “FRAP”, no entres en pánico; están simplemente liberando esa energía acumulada y divirtiéndose como solo ellos saben hacerlo. Si bien estos momentos pueden parecer eternos, la realidad es que son una parte valiosa de la personalidad vibrante de tus mascotas.