Un snack especial para el perro, ¿es bueno o es malo?

Un snack especial para el perro es gratificante y a menudo se utiliza como un pequeño regalo para nuestras mascotas, pero también tiene otras funciones. ¿Y cómo se deben incorporar en una dieta adecuada? Los pros y contras de un snack especial

Los perros viven a nuestro lado, adoptando a menudo nuestros hábitos, y al igual que nosotros, pueden disfrutar de un buen snack. ¿Correcto o incorrecto? ¿Una buena costumbre o una debilidad? En primer lugar, estos deliciosos bocadillos entre comidas tienen un mérito: permiten que nuestros amigos de cuatro patas disfruten de un pequeño momento diario de placer y lo compartan con nosotros. Precisamente por esta razón, la oferta de snacks en el mercado es amplia y está en constante crecimiento.

Nombres diferentes y un punto clave a recordar

Es bien sabido que los snacks, meriendas y bocadillos, tanto para nosotros como para nuestros perros, no pueden satisfacer todas las necesidades nutricionales necesarias. De hecho, no se trata de una comida completa, sino más bien de un aperitivo o un bocado rápido. No en vano, desde el punto de vista legal, los snacks se denominan “alimentos complementarios” precisamente porque es necesario asociar otro tipo de alimento para que el perro obtenga todos los nutrientes que necesita.

¿Para qué sirven los snacks para perros?

Los snacks pueden cumplir diversas funciones, además de ser un delicioso tentempié. De hecho, también se pueden utilizar para educar al perro y recompensarlo cuando ha aprendido una regla o ha realizado un comportamiento correcto. Otros snacks están diseñados para promover la limpieza de la cavidad oral y, en particular, de los dientes, higienizando la boca y ayudando a eliminar el sarro. En cachorros, son una herramienta muy útil para perder los dientes de leche y fortalecer la dentadura definitiva, reduciendo su necesidad de morder, cortar y masticar.

El snack, por lo tanto, puede combinar lo útil con lo agradable, ¿pero es todo positivo? Absolutamente no. De hecho, se debe tener mucho cuidado para que los beneficios de los snacks no se conviertan en un arma de doble filo. Siempre debemos recordar que el snack suele ser una recompensa especial para el perro y no debe sustituir la comida diaria.

Un peligro oculto

Cuando se manejan los snacks, es importante ser conscientes de que un momento de placer puede traer problemas de salud para nuestro amigo más querido. El snack incorrecto, incluso el más pequeño, puede comprometer una buena alimentación y crear un riesgo para la salud.

Sería absurdo prestar tanta atención a la alimentación de nuestro perro, eligiendo cuidadosamente alimentos secos y húmedos, y luego no prestar suficiente atención a los snacks. Si están contaminados con sustancias químicas o farmacológicas, estos alimentos pueden causar problemas de salud que lamentablemente afectan a muchas mascotas hoy en día: picazón en el cuello y la espalda, dermatitis, otitis, lagrimeo constante, deseo obsesivo de comer hierba, vómitos nocturnos con el estómago vacío, heces variables hasta llegar a la diarrea crónica, flatulencia, inflamación de las glándulas anales, lamido obsesivo de la pata, excitabilidad e irritabilidad, ladridos continuos y miedos.

Cómo elegir un snack especial para el perro

Si no queremos eliminar los snacks, lo ideal para la salud del perro sería seguir un Programa Nutricional Integrado en el que se combinen alimentos secos, húmedos y snacks de manera sinérgica. Sería óptimo seleccionar alimentos y snacks con pocos ingredientes, pero de alta calidad y pureza absoluta, preferiblemente producidos localmente en lugares donde la naturaleza aún muestra su lado benigno, con el fin de minimizar el riesgo de intolerancias o alergias. Islandia y Nueva Zelanda, por ejemplo, son auténticos oasis vírgenes de los cuales podemos obtener materias primas limpias.

En adultos, los snacks pueden favorecer la limpieza de la cavidad oral; en cachorros, son una herramienta muy útil para perder los dientes de leche y fortalecer la dentición definitiva.

Reglas claras antes del placer

Como hemos mencionado, lo ideal para la salud y el bienestar sería utilizar snacks en combinación con alimentos secos y húmedos. En cualquier caso, si los snacks se elaboran siguiendo los criterios adecuados (sin contaminantes, con proteínas limpias de cría extensiva y fuentes puras), se pueden dar con tranquilidad, independientemente del tipo de alimentación elegido.

La única precaución que debemos seguir es ceñirnos a la tabla de raciones diarias, especialmente en el caso de snacks híper proteicos, no porque no sean saludables, sino porque exagerar nunca es beneficioso.

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