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Raza de perro, el Pit Bull temido y amado

De hecho, se trata de un perro con múltiples cualidades, pues destaca por su agilidad, su temperamento paciente y su amabilidad hacia los humanos.

La historia que tal vez no conocías

La historia del pit bull terrier americano y sus ancestros, bulldogs y terriers, está impregnada de sangre. Los antiguos pitbulls, “pit dogs” o “pit bulldogs”, eran perros originarios de Irlanda e Inglaterra y, en un pequeño porcentaje, de Escocia.

La vida en la época del siglo XVIII era difícil, especialmente para los pobres, los cuales sufrían verdaderamente las plagas de alimañas, como ratas, zorros y tejones. Ellos tenían perros por necesidad, pues de no ser así se exponían a padecer enfermedades y problemas de abastecimiento en sus hogares. Estos perros eran los magníficos terriers, criados de forma selectiva a partir de los ejemplares más fuertes, hábiles y tenaces. 

En el Reino Unido, la historia se remonta a principios de 1800. Los pitbulls se criaron originalmente a partir de antiguos bulldogs ingleses (estos perros son similares en apariencia al bulldog americano actual) que ganaron su popularidad en las islas británicas en un cruel deporte de sangre conocido como “bull baiting”, donde uno o dos bulldogs eran puestos a hostigar a un toro durante horas hasta que el animal colapsaba por fatiga, lesiones o ambos. 

Estos partidos se llevaban a cabo para el entretenimiento de las clases en lucha; una fuente de alivio del tedio de las dificultades. Desde el año 1816 y hasta el 1860, las peleas de perros estuvieron en auge en Inglaterra, a pesar de su prohibición entre los años 1832 y 1833, cuando se abolió el bull baiting (peleas con toros), el bear baiting (peleas con osos), el rat baiting (peleas con ratas) y hasta el dog fighting (peleas entre perros). Lamentablemente, esta actividad se extendió hacia Estados Unidos, alrededor de los años 1850 y 1855, ganando popularidad rápidamente entre la población.

En un intento por terminar con esta práctica, en el año 1978, la sociedad para la prevención de la crueldad en los animales (ASPCAprohibió oficialmente las peleas de perros, pero, aun así, en 1880 esta actividad siguió teniendo lugar en diversas regiones de Estados Unidos.

Después de aquella época, la policía fue eliminando poco a poco esta práctica que perduró en la clandestinidad por muchos años. De hecho, incluso hoy en día, se siguen llevando a cabo peleas de perros de forma ilegal. 

Cualidades le sobran

El pitbull terrier americano (APBT) es una de las razas caninas más conocidas de entre todos los terrier. Es la raza por excelencia a partir de la cual se crean las distintas líneas de sangre o tipologías. Lamentablemente, aún en la actualidad siguen generando controversia debido a su posible “carácter combativo” hacia otros perros.

De hecho, se trata de un perro con múltiples cualidades, pues destaca por su agilidad, su temperamento paciente y su amabilidad hacia los humanos. Es por tanto una raza muy polivalente y versátil.

Podemos diferenciar al american pit bull terrier (APBT) de los denominados perros “terrier de tipo bull”. En el primer caso, estamos ante una raza de perro concreta y bien definida, registrada con este nombre por la United Kennel Club en 1898 y por la American Dog Breeders Association en 1909.

Cabe mencionar que, en el segundo caso, el término hace referencia a un grupo amplio de distintas razas de perros con características físicas similares.

No es correcto hablar de “razas de perros pitbull” o “tipos de perros pitbull”, porque no existen tales. Lo que sí se puede hacer es diferenciar las distintas líneas de sangre que existen.

Fuerte y robusto, aunque de movimientos ligeros, el pit bull seguramente posea más músculos por kg de peso que cualquier otra raza. El pit bull tiene el centro de gravedad bajo y parece más largo que alto. 

El pitbull es un animal que con cariño y buen adiestramiento se convierte en un compañero fiel y cariñoso para toda la vida. Su agresividad tiende a controlarse si sabemos cómo educarlos. Busque siempre a un experto para su entrenamiento.

Un perro con demasiada personalidad

  • La mayoría son compañeros amantes de la diversión, nobles y pacientes con los miembros de la familia. Como en otras razas, hay excepciones.
  • Los pit bulls fueron creados para ser valientes y continuar con lo que estén haciendo a pesar de la adversidad. Estas cualidades hacen de él un animal obstinado, tenaz y sin miedo. Como cualquier otro perro grande, deben ser supervisados cuando estén con niños.
  • Estos perros aman a las personas y no tienen idea de que su tamaño es un impedimento para ser un perro faldero. 
  • Confiados y profundamente conscientes de su entorno son perros guardianes que pueden alertarlo sobre la presencia de extraños, pero eso se debe principalmente a que están ansiosos por saludar a “sus” invitados.
  • Si bien su amor por las personas los hace fracasar como perros guardianes, su coraje es inigualable y defenderán a su familia con sus vidas.
  • Como todos los perros, los pitbulls terrier estadounidenses necesitan una socialización temprana (exposición a muchas personas, imágenes, sonidos y experiencias diferentes) cuando son jóvenes. 
  • La socialización ayuda a garantizar que su cachorro crezca y se convierta en un perro completo.
Tipos de American Pitbull Terrier

Viviendo con un pit bull

La vida con un pit bull es siempre una aventura. Son perros amantes de la diversión que siempre están dispuestos a jugar. Deben tener un periodo de ejercicio intenso todos los días. Aunque son perros resistentes, no son perros de clima frío y se deben proteger de los elementos.

Los pit bulls deben ser entrenados en obediencia porque es una buena actividad para establecer un vínculo. Debido a que no siempre son buenos con otros perros deben llevar una correa cuando haya más perros.

Estos perros son extremadamente inteligentes y aprenden órdenes y trucos con facilidad. Tienen entusiasmo por la vida y les encanta involucrarse en todo lo que sucede a su alrededor. Mantienen un comportamiento de cachorro hasta bien entrada la edad adulta, y esa vitalidad hace que sea un placer vivir con ellos. Una vez que haya conocido y conocido a esta raza, se preguntará cómo pudo vivir sin una.

  • Los american pit bull terriers no son una buena opción para las personas que pueden prestarles poca o ninguna atención.
    Deben ser entrenados y socializados cuando son jóvenes para superar las tendencias de la raza hacia la terquedad y la mandonería que, combinadas con su fuerza, pueden hacer que sea difícil de manejar si no ha aprendido que usted está a cargo.
  • El american pit bull terrier debe mantenerse con correa en público para evitar la agresión hacia otros perros. No es una buena idea dejar que estos perros anden sueltos en los parques para perros. Si bien es posible que no comiencen una pelea, nunca retrocederán y lucharán hasta el final. Los pitbulls estadounidenses que no se socializan adecuadamente cuando son cachorros pueden volverse agresivos con otros perros.
  • Los american pit bull terriers tienen una gran necesidad de masticar y sus poderosas mandíbulas hacen que los juguetes baratos o endebles desaparezcan rápidamente. Dale solo juguetes resistentes y duraderos que no se puedan masticar ni tragar.
  • Los american pit bull terriers se adaptan mejor a los propietarios que pueden ofrecer un entrenamiento firme y justo y una disciplina suave y constante.

Todos los días un compromiso

Espere pasar alrededor de una hora al día caminando, jugando o ejercitando a este perro. 

Si bien aman a las personas, los american pit bull terriers son fuertes para su tamaño y pueden ser tercos si se los deja a su suerte. Comience temprano el entrenamiento de obediencia y continúe durante toda la vida del perro. El entrenamiento es la base para una relación sólida con su mascota.

Los american pit bull terriers no deben dejarse afuera por mucho tiempo porque no toleran bien el frío. Incluso sin importar el clima, a estos perros les va mejor como perros domésticos. Forman fuertes lazos con sus familias y sufrirán si se les deja solos por períodos prolongados.

Los american pit bull terriers aman a los niños. Robustos, enérgicos y tolerantes, son compañeros de juego ideales. Dicho esto, ningún perro de ningún tamaño o raza debe dejarse sin supervisión con niños.

Cuando no pueda haber un adulto para supervisar lo que sucede, los perros deben ser encerrados en jaulas o perreras, especialmente después de que alcanzan la madurez sexual, cuando pueden comenzar a probar la posibilidad de convertirse en líderes de la “manada”.

No permita que los niños jalen las orejas o la cola de un perro. Enséñeles a nunca acercarse a ningún perro mientras duerme o come ni a tratar de quitarle la comida.

Debido a su herencia de peleas de perros, algunos pitbulls terriers americanos conservan una tendencia a ser agresivos con otros perros, pero si se socializan temprano y se les entrena para saber qué comportamiento se espera de ellos, esa agresión se puede minimizar o superar, y muchos toleran a otros perros y gatos. Solo para estar seguros, siempre deben ser supervisados ​​en presencia de otras mascotas.


Argumentos científicos sobre la peligrosidad de los perros

Un estudio de Barbara Schoening publicado en The University of Bristol respecto a que la agresividad no está asociada a la raza. El pitbull terrier americano es considerado un perro potencialmente peligroso debido a sus atributos físicos. No obstante, esto no valora en ningún caso la psicología individual de cada individuo. De hecho, dentro del imaginario colectivo, los pitbulls son considerados de los perros los más peligrosos. Y esto suele provocar una falsa creencia: pensar que la agresividad está determinada por la raza.

La conclusión principal de un estudio publicado en la Universidad de Córdoba es que los dueños son los principales responsables de los ataques de sus canes. Según el autor, Joaquín Pérez Guisado, la causa mayoritaria de que un animal manifieste conductas relacionadas con la agresividad es la mala o inexistente educación que haya recibido con sus dueños. No obstante, existen otros factores que pueden influir como la genética, la socialización o las experiencias vividas. Asimismo, en otro estudio publicado en la University of Bristol, la científica Barbara Schoening afirma que vincular la agresividad a unas razas determinadas no tiene ningún rigor científico.

De hecho, un tercer artículo publicado en la edición americana del Huffington Post va más allá. Una investigación llevada a cabo por la American Temperament Test Society en más de 450 razas de perros señala que el pit bull terrier americano es la quinta raza canina más tolerante, justo por detrás del labrador retriever, el golden retriever, el staffrodshire bull terrier y el pug o carlino.

Aun así, la ley no parece estar de parte del pit bull terrier americano, pues argumentan que debido a su poderosa mordedura y a su fuerza física debe ser obligatorio el uso de bozal y otras medidas preventivas. Pero otros perros con características muy similares no están considerados como “perros potencialmente peligrosos” (PPP), ¿por qué sucede? Porque la historia juega un papel decisivo.

Hoy en día, todas las razas consideradas como “potencialmente peligrosas” han sido utilizadas en peleas caninas, caza deportiva, defensa del hogar, protección del ganado y hasta como perros de guerra.

Por desgracia, todos estos factores han fomentado que la sociedad llegue a creer que estos perros son peligrosos, sin que existan estudios científicos que lo puedan avalar.

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