Tener a nuestro perro babeando por toda la casa durante todo el día no es precisamente una imagen agradable. Es una situación que muchos dueños de mascotas encuentran incómoda, y mucho menos feliz cuando descubren que sus muebles, ropa e incluso sus hijos pequeños están empapados con la saliva de su perro.
Sin embargo, esta condición de algunos perros, podemos explicarla y encontrar no proprio las soluciones pero si poder entender mejor este tipo de situación.
Existen algunas razas de perros que tienden a babear más que otras, y esto es completamente normal debido a la estructura anatómica de su boca y la cantidad de glándulas salivales activas. Babear o tener salivación excesiva o hipersalivacion, conocida en los humanos como “sialorrea”, es un factor normal en los perros.
El ejemplo más común proviene de razas como el San Bernardo, el Mastín Napolitano y los perros braquicéfalos con sus hocicos achatados, que a menudo presentan este y otros problemas muy importantes relacionados a la respiración.
Es importante destacar que la tendencia a babear puede variar de un perro a otro, y cualquier cambio en este comportamiento no debe ser subestimado. Ahora, probamos a explicar por qué esto ocurre.
Babear a veces es fisiológico
Existen momentos fisiológicos en los que la salivación excesiva puede ser completamente normal. En primer lugar, algunos perros pueden babear cuando están emocionados o ansiosos. Es bastante común ver a un perro salivar abundantemente cuando se les muestra un delicioso bocadillo que no pueden tener.
La presencia de comida u otros estímulos sensoriales puede desencadenar la producción de saliva. Además, los perros tienen un olfato muy sensible, por lo que incluso un olor leve para nosotros puede hacer que babeen.
Algunos perros comienzan a babear tan pronto como tomas la correa, porque saben que es hora de salir a pasear. Sin embargo, no todos los motivos detrás del babeo son positivos, y algunos comportamientos excesivos pueden ocultar problemas de salud.
A veces puede surgir un problema en la boca
Si notas que tu perro babea constantemente y no parece haber una razón aparente, es una buena idea consultar al veterinario para descartar problemas de salud. Una causa común puede ser la náusea o problemas digestivos.
Si tu perro tiene problemas dentales como gingivitis, caries o infecciones dentales, es posible que experimente incomodidad o dolor, lo que podría llevarlo a babear en exceso.
Problemas de deglución, como la presencia de objetos extraños, también pueden ser una causa. Si esto ocurre de repente, mucho mejor elegir rápidamente una visita al veterinario para que examine y pueda revisar su boca.
Pero a veces son problema de salud grave
La salivación ocasional en pequeñas cantidades es normal y generalmente no debería preocuparte. Entonces, ¿cuándo se convierte el exceso en un problema? Si tu perro babea constantemente durante todo el día sin una causa directa y, sobre todo, si este comportamiento va acompañado de otros síntomas como vómitos, diarrea, pérdida de peso o cambios en su comportamiento. Cuando esto sucede, es fundamental consultar a tu veterinario, quien puede realizar exámenes de sangre y otras pruebas para identificar la causa subyacente.
Y a veces se convierte en una emergencia
Aunque se trata de casos más raros, el babeo excesivo puede ser una señal de alerta de una emergencia médica. Los perros pueden comenzar a babear debido a una reacción alérgica grave o un shock anafiláctico causado por picaduras de abejas o avispas, especialmente si la picadura ocurrió dentro de la boca, lo que podría provocar la inflamación de la garganta y dificultades respiratorias.
Otras razones que requieren atención médica de emergencia son la intoxicación, ya sea por plantas venenosas o alimentos no comestibles. Lo mismo se aplica a las nueces, las castañas y las aceitunas verdes. La torsión gástrica, una condición en la que el estómago se infla rápidamente debido a la acumulación de gas, comida o líquidos y luego se tuerce, atrapando su contenido, puede presentar uno de los primeros síntomas como una salivación excesiva.
En este caso, podría estar relacionado con comer muy rápido sin masticar adecuadamente y requiere atención médica inmediata para salvar la vida de tu mascota.
Recuerda que estar atento a los cambios en el comportamiento de tu perro y consultar a un veterinario cuando sea necesario es esencial para garantizar su salud y bienestar. Con el cuidado adecuado, podrás abordar el babeo excesivo y mantener a tu fiel amigo feliz y saludable.
Aceptar que tu perro de vez en cuando te babea por la casa, o encima de tu ropa recién lavada, a veces no es tan grave como parece, lo puede aceptar es su naturaleza, pero si estamos en alerta para reconocer cuando las cosas pueden esconder algo malo.