Un intrigante estudio nos adentra en el fascinante mundo de la comunicación entre humanos y los perros. Aunque siempre hemos intuido que nuestros perros comprenden más de lo que admitimos, ahora la ciencia respalda esta noción con evidencia sólida.
Aquí no se trata solamente de que los perros puedan interpretar o haber asociado un sonido a un objeto o acción.
¿Alguna vez te has preguntado si los perros realmente entienden el lenguaje humano? Algunos de ustedes responderán absolutamente que sí, otros dirán que no, vamos: por más inteligente que sea mi perro, no es que comprenda el lenguaje humano. Pero sea cual sea tu respuesta, la opinión científica sobre el tema te sorprenderá.
Similar a un niño
Ya sabemos que los perros pueden reconocer algunas palabras y las distinguen, responden a comandos. También sabemos que aprenden su nombre, reaccionan cuando escuchan nuestra voz y entienden cuando les estamos hablando a ellos o a alguien más. Además, los perros también pueden comprender si les estamos diciendo una mentira o dando un cumplido sincero, y nos juzgan, pensando que a veces somos tontos y hacemos cosas que, para ellos, no tienen sentido. Ahora, un nuevo estudio recientemente publicado en Communications Biology revela que nuestros mejores amigos muestran una mayor sensibilidad cerebral ante el habla dirigida tanto a ellos como a los niños, especialmente cuando son mujeres quienes hablan.
Pre-lingüístico
Por más técnico que pueda parecer, este estudio demuestra por primera vez que el centro del lenguaje en los cánidos se desarrolla de manera similar al de los niños. Investigadores húngaros del Departamento de Etología de la Universidad de Eötvös Loránd han demostrado mediante resonancias magnéticas funcionales que el cerebro de los perros es capaz de procesar el lenguaje con una prosodia exagerada, es decir, como hablamos a los recién nacidos para estimular el balbuceo de los lactantes.
Captando la atención
Cuando nos comunicamos con individuos con habilidades lingüísticas limitadas, como los recién nacidos pero también nuestras mascotas, tendemos a utilizar un estilo vocal específico caracterizado por un acento, una modulación de la voz (llamada prosodia) exagerada para captar y mantener su atención. Y esto no solo funciona, sino que es muy importante ya que contribuye al desarrollo cognitivo, social y lingüístico saludable. “Estudiar cómo el cerebro de los perros procesa el lenguaje directo es emocionante porque puede ayudarnos a comprender cómo la prosodia contribuye a un procesamiento eficiente del lenguaje en una especie no humana, que confía en diferentes señales vocales”, como explican los investigadores húngaros del Departamento de Etología de la Universidad de Eötvös Loránd.
Tonos dulces y amables
El hecho de que la voz femenina llame más su atención y active más áreas del cerebro aún no está claro. Los investigadores han identificado diferencias de tono y frecuencia basadas en la anatomía en el habla femenina, y también hay pruebas de que los géneros tienden a usar la voz de manera diferente hacia un destinatario. Las mujeres tienden a articular excesivamente las vocales y utilizan una gama de tonos más amplia en comparación con los hombres. Todas estas características son apreciadas por el cerebro de los perros y le ayudan a interpretar mejor los diversos significados, revelando que no es del todo cierto que los perros obedezcan más los comandos si nuestro tono de voz es asertivo y autoritario.
Este estudio nos ayuda a valorar aún más la estrecha relación que compartimos con nuestros queridos amigos caninos y nos invita a comunicarnos con ellos de una manera que resuene en su mundo emocional y cognitivo.
Podemos decir claramente que los perros no solo captan nuestras palabras, sino que también entienden algunas sutilezas de nuestra voz y tono, revelando una asombrosa sensibilidad cerebral.
Así que la próxima vez que hables con tu peludo amigo, recuerda que tu elección de palabras y tono puede marcar una diferencia significativa en su comprensión y conexión contigo.
