Los que tenemos gatos, valoramos su dulce y discreta compañía en casa, y sobre todo la comodidad de no tener que pasearlos. Probablemente a muchos les ha pasado por la cabeza la idea de adoptar otro gato. ¡Qué gran idea!
Por Javiera Paz Pernas
Sin dudas vas a ganar una doble ración de ronroneos y caricias, y le cambias la vida a otro animalito, alejándolo del peligro que significa vivir en las calles. Y además le brindas compañía a tu gato.
Siempre un Plan B
La adopción de otro gato no siempre es exitosa. Tienes que tener eso en mente porque a veces, pese a todos los esfuerzos, no resulta. Cuando no congenian, cuando se pelean y uno de los gatos corre el riesgo de salir herido o la familia también, lamentablemente, lo mejor será sacar al gato nuevo para proteger al resto. Y es que al conseguir otro gato, deberás dejar abierta la posibilidad de regresarlo al albergue o en el mejor de los casos encontrarle un nuevo hogar.
A tener en cuenta
• Edad. Lo más recomendable es adoptar un nuevo gato con una edad similar al tuyo. Un gato entrado en años difícilmente va a tolerar la energía de un cachorro.
• Castrados. Sean hembras o machos, los gatos deben estar castrados para evitar comportamientos territoriales o de apareamiento.
• Espacio. Con un nuevo gato, tendrás que pensar por dos. Dos cajas de arena, platos de agua y comida, así como un lugar de descanso alejado del otro gato.
• Refugio. Los gatos deben tener un lugar para esconderse y sentirse protegidos. Esta puede ser una caja de cartón con un hueco para entrar y salir.
Cuando el nuevo gato llega
El nuevo gato debe estar aislado por varios días sin contacto con el gato de la casa. Así se podrán oler y oír, se irán conociendo.
- Paulatinamente, permite que se vean unos minutos al día, pero sin tocarse para evitar que se ataquen. Si el gato de la casa se acerca curioso y sin comportamiento agresivo, premia eso con caricias, palabras de afecto o una golosina. Es una buena señal de que van por buen camino. Si por el contrario, se acerca bufando sepáralos y sigue con paciencia haciendo acercamientos progresivos. Puedes ayudar esparciendo Cat Nip o Fellyway en el ambiente.
- Aprovecha este tiempo para desparasitar al gato nuevo y llevarlo al veterinario por sus vacunas, así proteges a tu gato de posibles contagios.
- Córtale las uñas a todos.
- Pasa un trapito limpio por los cachetes de un gato y frótaselo en los cachetes al otro. De esa forma mezclarás sus olores y ambos olerán igual, con lo que entenderán que son de la misma familia.
- El día que sientas que pueden estar juntos, supervisa la situación para intervenir antes de que se produzca alguna hostilidad.
- En todo momento acaricia a tu gato para que no se sienta desplazado por el otro.
Esperamos que estos tips sean muy útiles para integrar otro gato a tu familia. Como ves, EL SECRETO ES PACIENCIA. ¡Que tengas una experiencia gatuna exitosa!