Incluso un gato solo en casa puede sufrir la ausencia de sus dueños, pero el olor de nuestra ropa no lo tranquiliza, más bien al contrario.
Buscando soluciones para dejar nuestro gato solo en casa, a veces escuchamos diferentes consejos sobre comportamiento, educación o entretenimiento para nuestras mascotas, cuando estamos afuera de casa, y estamos obligados a dejarlos solo.
Uno de estos “consejos” que seguro que muchos ya lo han probado, es lo de dejar un calcetín usado junto a nuestro gato cuando nos vamos, con la intención de hacerlo sentir menos solo, pero podría no ser una buena idea.
Según un estudio publicado en la revista Applied Animal Behaviour Science, nuestros olores no tienen el efecto tranquilizador que pensábamos. De hecho, en el mejor de los casos, no tendrían ningún efecto, y en el peor, podrían hacer que el gato perciba aún más nuestra ausencia. Este estudio señala que los gatos necesitan la presencia física de sus dueños para sentirse tranquilos.
El experimento involucró a 42 personas con sus respectivas mascotas de cuatro patas. Los investigadores les pidieron a los dueños que llevaran consigo un objeto impregnado con su olor, como una camiseta, un zapato o un calcetín, y que lo dejaran junto a sus animales en una habitación cuando se ausentaran. En general, durante la ausencia de sus dueños, los gatos no mostraron interés en los objetos con el olor de sus propietarios, lo que significa que estos objetos no contribuyeron a calmarlos ni a aliviar el estrés de la separación.
Aún más estrés. Para 16 gatos, en cambio, el calcetín o la camiseta tuvieron un efecto negativo, que se manifestó a través de maullidos ruidosos y diversos tipos de vocalizaciones. “Los objetos dejados por los dueños no ayudaron a reducir el estrés de sus gatos“, afirma Krystin Vitale, uno de los autores del estudio. “Por el contrario, empeoraron la situación para algunos“.
Este estudio demuestra que, a diferencia de los bebés que pueden calmarse con el olor de su madre, los gatos necesitan la presencia física de sus dueños. Dado los resultados del experimento, los autores subrayan que es mejor evitar dejar objetos personales con nuestros amigos peludos. En el mejor de los casos, no tendría ningún efecto, y en el peor, solo lograría ponerlo más nervioso.
En resumen, parece que nuestros gatos necesitan más que simplemente el olor de nuestros objetos personales para sentirse cómodos en casa cuando no estamos. Para asegurarnos de que estén lo más tranquilos posible, es importante pasar tiempo con ellos y proporcionarles la atención y el afecto que necesitan cuando estamos en casa y, si es posible, hacer arreglos para que no estén solos durante largos períodos de tiempo.