A diferencia de lo que muchos creen, existen gatos “sombras” que te siguen a todas partes, no se pierden ni un solo movimiento tuyo y prefieren claramente todo lo que haces en lugar de lo que creemos que es más “gatuno”.
A veces, los gatos pueden ser posesivos y obsesivos, te controlan, te siguen a todas partes, incluso al baño, por supuesto, y se comportan exactamente como acosadores. Si tu gato también es así, entonces sabes lo que significa tener sus pelos en todas partes, por ejemplo. ¿Y también sabes que este comportamiento puede llegar a ser obsesivo?
¿Todo esto es normal?
Los gatos son animales territoriales y, por lo tanto, están muy interesados en todo lo que sucede en su territorio. Saben perfectamente que las puertas esconden mundos por explorar, por lo que te siguen a donde sea que vayas en casa, con la esperanza de entrar en lugares a los que normalmente no tienen acceso.
Si te persigue cada vez que entras en casa, es para captar cada olor que llevas contigo, pero sobre todo para frotarse y dejar su aroma en ti.
Esto se considera normal y es común en la mayoría de los gatos.
Sin embargo, para algunos, el límite es muy tenue, al punto de ser considerados acosadores crónicos, justo como los modernos stalkers.
En resumen, es normal que los gatos estén interesados en ti, en lo que haces y en los olores que traes a casa, y quieran tu compañía. Pero puede considerarse menos normal si están constantemente pegado a ti, no tiene sus propios espacios o momentos de independencia y se vuelve agresivo con otros gatos o en momentos de juego.
Rutina y oportunidades
Los gatos pueden desarrollar fuertes lazos con sus dueños y buscar su compañía constante. Además, los gatos son criaturas muy curiosas e interesadas en todo lo que estás haciendo. Por lo tanto, podrían seguirte solo para satisfacer su naturaleza investigativa.
Los gatos domésticos, los que viven feliz adentro casa, también disfrutan de la rutina y pueden sentirse cómodos cuando están cerca de personas familiares. Si pasas mucho tiempo en casa o tienes una rutina regular, tu gato podría haberse acostumbrado a verte en momentos específicos y a estar contigo en otros.
Además, los gatos son oportunistas, y si notan que pasando tiempo contigo obtienen atención, caricias o incluso comida, podrían asociar tu presencia con estas recompensas positivas y buscarte en consecuencia.
Inseguridades y sociabilidad
Al mismo tiempo, los gatos pueden percibir a sus dueños como una fuente de seguridad. Si tu gato se siente amenazado o inseguro, podría buscar tu presencia para sentirse más protegido. Si además no tiene suficiente estimulación en casa o actividad durante el día, podría intentar interactuar contigo como una forma de romper la monotonía. En cualquier caso, si el comportamiento de tu gato te parece excesivo o preocupante, una visita al veterinario sería muy útil para obtener consejos específicos sobre la situación.
Esto es demasiado
Cada gato tiene su propia personalidad, experiencias y preferencias, lo que significa que su comportamiento puede verse influenciado por una serie de factores. Si tu gato está particularmente apegado a ti y se adhiere a ti como una ventosa, no significa necesariamente que sea inseguro, sino que encuentra consuelo estando a tu lado y te considera parte de su grupo y cadena de confianza, y no te cambiaría por nada en el mundo.
Si esto se convierte en agresividad o una protección excesiva hacia ti, podría deberse a un trastorno de comportamiento. Es muy difícil superar estas situaciones por uno mismo, por lo que lo mejor que puedes hacer es consultar a un veterinario o a un experto en comportamiento felino que pueda analizar la situación y encontrar soluciones efectivas.
Ansiedad por separación
Incluso sin llegar al acoso obsesivo, algunos gatos pueden sufrir ansiedad por separación, al igual que los perros, lo que los lleva a querer estar con sus humanos siempre que sea posible.
Entre las reacciones más comunes se incluyen maullidos constantes, un exceso de acicalamiento con pérdida de pelo en mechones, una alimentación irregular y problemas con la caja de arena.
Algunos gatos podrían simplemente esconderse entre la ropa sucia para percibir tu olor en tu ausencia, mientras que otros podrían empezar a hacer sus necesidades en tu cama, sofá o armario.
Y recuerden siempre que regañarlos al regresar no sirve de nada, e incluso podría ser contraproducente. En este caso, la ayuda de un experto es indispensable para obtener respuestas más tranquilizadoras.