Cuando en el gato, el pelo se acumula en el estómago, el vomita una verdadera “bola de pelo” (también llamada hairball). Los problemas de salud pueden ocurrir cuando el gato no puede arrojar el exceso de pelo acumulados en su estómago y no sale al vomitar.
Una de las características más comunes de un gato es su nivel de limpieza.
Pero mantener una limpieza de este tipo sin que ayudemos en nada para nuestra mascota tiene su precio. Y se llama “bolas de pelo”, que no es otras cosas que su mismo pelo que él se va limpiando con su lengua todo el día. Esto más de las veces se pueden convertir en un problema de salud muy grave si no pueden ser expulsadas, por lo que el animal necesitará de nuestra ayuda y atenciones para evitar de empeorar las cosas.

Los gatos invierten mucho tiempo limpiándose para mantener su pelaje en buen estado.
Una tarea que pueden conseguir con facilidad gracias a su especial lengua que cuenta con pequeñas espinas que le permiten arrastrar todo el pelaje que se le cae de forma efectiva. El problema reside en que el animal no es capaz de escupir ese pelo una vez que lo arrastra con su lengua, por lo que no tiene otra alternativa que tragarlo.
Cuando el pelaje se acumula de forma excesiva en el estómago del animal, el mismo hará el esfuerzo por vomitar, desechando así la bola de pelo. Se trata de un problema grave que tiene sus causas en la falta de cepillado e incluso enfermedades relacionadas con la piel y el pelaje.
Sin embargo, en ocasiones no consiguen vomitar con éxito la bola de pelo pues la misma se queda trabada en el intestino produciendo estreñimiento severo e imposibilitando su eliminación.
Es aquí cuando resulta importante optar por remedios urgente para ayudarle en su expulsión, sin embargo, si el animal no lo consigue deberemos acudir al veterinario de forma urgente.

Medidas para evitar la formación de “bolas de pelo”
Para no correr riesgos que esta situación pase a ser un problema muchos más grande y con complicaciones mayores para nuestro gato, veamos cómo podemos prevenir o facilitar la eliminación del pelo de nuestro gato, después que lo ha ingerido.
- Cepillar con frecuencia al gato, sobre todo si tiene pelo largo. De esta forma, el pelo que extraigamos no será ingerido.
- En la época de muda, que identificaremos fácilmente al encontrar más pelos sueltos, o generalmente en primavera, es bueno que intensifiquemos el cepillado.
- Ofrecer una buena alimentación que cuide de su pelo, con un adecuado aporte de fibra, favorece el correcto tránsito intestinal y, por lo tanto, ayuda a que el pelo que el gato haya tragado circule por el sistema digestivo sin causar problemas.
- Existen a la venta dietas que ayudan al control de las bolas de pelo.
- También podemos darle a nuestro gato regularmente malta, que es una pasta que precisamente va a favorecer la circulación intestinal y a ayudar a la eliminación del pelo ingerido.
- Debe tener agua limpia y fresca a su disposición. Una buena hidratación, repercutirá en la consistencia de las heces y en su facilidad para ser expulsadas, al favorecer la movilidad del tracto digestivo.
- La alimentación húmeda es otra opción válida para aportar líquidos a nuestro gato.
Por último, aunque se asume que es normal que los gatos vomiten bolas de pelo con cierta frecuencia, debemos saber que vomitar más de una vez a la semana es motivo de alarma y de consecuencia, seria oportuna una consulta veterinaria, para eliminar posibles dudas.