Educar o adiestrar una mascota

Educar o adiestrar a una mascota no es la misma cosa.



Por Rosa Velásquez Esquivel
 

Instructora canina  

Veterinaria Lazzy Vet 

Debemos con un poco de paciencia hacer que nuestro perro pueda vivir con nosotros, y lo demás, de una forma amigable y correcta.

Adiestrar es conseguir que nuestro perro aprenda determinadas conductas y habilidades con una serie de órdenes para un fin determinado y específico.

Educar a nuestra mascota significa, igual que educar a nuestros hijos. Debemos educar a nuestra mascota, por ejemplo a:

En vista de que la mayoría de perros que conviven con nosotros y con nuestra familia  son de compañía, en esta nota hablaremos de “educar” a nuestros perros para lograr una buena convivencia con otros animales, con otras personas y con nosotros mismos.

Comida, juguetes y cariño son fundamentales a la hora de educar a nuestra mascota.

Solo controlando estos recursos, siendo pacientes y perseverantes lograremos educar a nuestra mascota y evitar problemas de conducta a futuro.

Educando a mi perro 

La educación de nuestro perro debe realizarse con una actitud serena, tranquila y firme a la vez, lo que requiere de paciencia y constancia.

Nuestro perro trae con él una información mínima de comportamientos y conductas.

En su fase inicial es fundamental lo que aprende con su madre y hermanos.

Su aprendizaje se irá completando con las experiencias y vivencias que tenga en su día a día, y según estas se vayan presentando, nuestro perro las resolverá al principio instintivamente y luego a través del comportamiento aprendido.

Por ello es sumamente importante lograr que entienda qué queremos de él.

Marcar las pautas desde que lo llevamos a casa, porque de acuerdo a nuestras costumbres y necesidades iremos forjando rutinas con él como nuevo miembro de la familia.

Por ejemplo, establecer horarios de comida y de juego, así como para hacer pipí o popó, etc.

Y para lograr estas rutinas es importante controlar los recursos con que contará nuestro perro. Estos recursos son: comida, juguetes y cariño.

Parte de una Tenencia Responsable y correcta, es educarnos a nosotros mismos para saber cómo manejar las distintas conductas de nuestros compañeros.

Entender que a veces nosotros mismos tomamos aptitudes que no son favorables para su formación.

Debemos saber demostrarles nuestro amor también es actuar con firmeza y responsabilidad. 

¿Castigas a tu mascota?

Comparte esta publicación